Aunque parezca mentira, adelgazar y perder peso no solo se basan en contar calorías, reducirlas comiendo menos y quemándolas entrenando o haciendo ejercicio. Existen otros métodos, igual o más eficaces, que nos ayudarán a quitarnos esos kilos demás, sin obsesionarnos por lo que comemos. Se los mostramos:
1. Sea consciente
Es hora de convertir los comportamientos negativos en positivos. Es importante prestar atención a lo que hacemos, de este modo, tendremos en cuenta los comportamientos poco saludables que llevamos o incorporamos a nuestra vida como comer por ansiedad, por estrés o por tristeza. Debemos distinguir cuándo comemos por hambre, y cuándo lo hacemos por otras necesidades como pueden ser las emocionales.
2. Baje el ritmo y coma despacio
Es igual de importante cómo come que lo que come. Un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition demostró que las persona que comen despacio tienden a comer menos que aquellos que comen rápido. Según sus autores es una estrategia eficaz para ayudarles a perder peso. Debemos recordar que la sensación de estar "llenos" tarda 20 minutos en llegar al cerebro.
3. Aumente la frecuencia de sus comidas, pero no la cantidad
Comer varias veces al día no tiene que convertirse en una excusa para comer más cantidad, ya que el metabolismo es un proceso químico que convierte la comida en energía, por lo que debe ingerir lo que sea capaz de gastar a lo largo del día. El ratio de su metabolismo basal es el número de calorías que su cuerpo quema cada día en reposo, por lo que conocerlo es fundamental para saber cuántas calorías debe comer a diario para mantener tu peso.
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